En tiempos de crisis, una buena forma de medir la fortaleza de una economía es la producción de objetos útiles. El país que fabrica productos con mejor tecnología, más baratos y más útiles, tiene una gran ventaja económica.
Hace poco he leído esto:
1º (fuente: libertaddigital.com) Los coches Low Cost conquistan el mercado internacional
Y de este artículo, he llegado a este otro:
2º (fuente: www.forbes.com) World's Cheapest Cars (traducción: Los coches más baratos del mundo)
Según Forbes, el coche más barato del mundo se fabrica en China (creo que ya nadie se sorprende por esto); en norteamérica el más barato se fabrica en México; el más barato de sudamérica, en Chile; de Europa, en Rusia y los nuevazelandeses son más baratos que los australianos.
Deduzco de la información de Forbes, que en España podemos arreglarnos con la compra de vehículos de segunda mano, pero cuando se trate de comprar un coche nuevo, posiblemente sea de fabricación extranjera. Nada bueno para la industria nacional.
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